Semifreddo de lavanda y pistacho
El semifreddo o "semifrío" es un postre clásico italiano. Cremoso y floral, rematado con pistachos tostados, te resultará tan fácil de preparar como de disfrutar.
Semifreddo de lavanda y pistacho
El semifreddo o "semifrío" es un postre clásico italiano. Cremoso y floral, rematado con pistachos tostados, te resultará tan fácil de preparar como de disfrutar.
Utensilios
Ingredientes
90 g pistachos tostados pelados
140 g azúcar
2 cucharaditas flores de lavanda, divididas
1/4 cucharadita sal marina fina
710 ml nata para montar
225 g queso mascarpone
Paso a paso
Forra un molde de pan con film de plástico, dejando que el film sobresalga unos 7 cm.
Añade los pistachos a la jarra de la picadora. Introduce la batidora de mano con cable en la jarra y tritura hasta que los pistachos estén picados en trozos no demasiado finos. Esparce 3 cucharadas de pistachos picados y 1 cucharadita de flores de lavanda a lo largo del molde que has preparado. Vierte los pistachos restantes en un bol pequeño y apártalos.
Añade el azúcar, 1 cucharadita de flores de lavanda y la sal a la jarra de la batidora. Utiliza la batidora para pulverizar las flores.
En un bol grande para mezclar, pon el azúcar de lavanda, la nata para montar y el queso mascarpone. Quita el brazo de la batidora de mano de la base y coloca el protector. A continuación, vuelve a colocar el brazo en la base e introdúcelo en la mezcla. Bate la mezcla hasta que se formen picos suaves. Utiliza una espátula para incorporar los pistachos restantes.
Vierte despacio el semifreddo en el molde, golpeando suavemente para eliminar las bolsas de aire y nivelar la mezcla. Cúbrelo con film de plástico e introdúcelo en el congelador hasta que se congele, 6-8 horas, o durante toda la noche.
Para servir, saca el recipiente del congelador y desmolda el semifreddo sobre una tabla de cortar. Retira el film de plástico y deja que repose durante 5 minutos para que se ablande. Córtalo con un cuchillo largo sumergido previamente en agua caliente.
Sugerencia: Este semifreddo es delicioso por sí solo, pero también se puede servir con una cucharada de compota de melocotón.