Paso a paso

1. Comienza por lavar muy bien las manzanas para eliminar la suciedad o los residuos. Con un cuchillo afilado, corta las manzanas en rodajas finas y uniformes. Utiliza un pelador de verduras o una cuchara para retirar la piel de la raíz de jengibre y córtala en láminas finas con un cuchillo afilado.

2. Coloca las rodajas de manzana y el jengibre uniformemente en una rejilla de secado. Deja que se deshidraten durante 1,5 horas, retira el jengibre y sigue deshidratando las manzanas otras 2,5 horas. También puedes comprar los trozos de jengibre y manzana ya deshidratados.

3. Corta la manzana deshidratada en trozos pequeños, pero reserva 6 rodajas. Mezcla los trozos de manzana, los pétalos de caléndula, el té rooibos y la raíz de jengibre deshidratada.

4. Añade 1,5 l de agua al hervidor de agua KitchenAid y ajusta la temperatura a 100 °C. Coloca la mezcla de té en infusores e introdúcelos en los vasos o tazas. Cuando el agua alcance la temperatura deseada, viértela en los vasos o tazas. Para dar un toque adicional de sabor, coloca una ramita de canela en cada té. Deja que infusione durante 5 minutos. Para terminar, añade una rodaja de manzana deshidratada.